Aunque existe una relación bastante significativa entre catar y degustar, son terminos que a la práctica resultan totalmente distintos.
Ambos cuentan con la particularidad de dar a probar y saborear el vino, percibir sus aromas y ver que tal marida un vino con alguna comida en especifico. La diferencia está en la técnica, opiniones y conocimientos que se debe tener de la bebida al momento de probarla.

La principal diferencia entre estos dos términos es que la cata de vino debe ser realizada por un catador pero ¿Qué es un catador de vino?. Es un especialista en esta bebida, debe tener conocimiento y experiencia sobre aromas, olores, textura y muchas otras cosas técnicas. Por su parte el degustador puede ser cualquier persona que bien conozca o no de vinos, pueda apreciar su sabor con simplemente el sentido del gusto, no es necesario que aplique técnicas para degustar.
Cata de vinos
Para realizar la cata de vinos es necesario utilizar oflato, vista y gusto, el catador debe ser especialista ya que debe dar un análisis técnico de la bebida, incluso al realizar la práctica puede saber la cantidad de años de envejecimiento, la calidad, el tipo de vid que se ha utilizado.
Para poder hacer una buena cata, el catador debe estar en un espacio libre de aromas, estar relajado, tomar notas de su apreciación y una buena iluminación que le permita ver con claridad la bebida.
Los catadores también deben tener una buena memoria olfativa, buen estado de salud y una muy buena concentración que le permita apreciar los sabores y estos logren estimular bien sus sentidos.
Degustación
La degustación puede considerarse como una cata sin análisis técnico ni un procedimiento tan riguroso como el del catador. Podrás dar tu apreciación acerca de olores y sabores pero sin la presión de dar una respuesta técnica ni acertada, simplemente disfrutar del sabor de la bebida.
La degustación sirve más para compartir y disfrutar los sabores y aromas generalmente con comidas con las que los vinos maridan muy bien e incluso en tours de viñedos.